Días difíciles para el histórico restaurante Casa Pedro
El famoso establecimiento se ve abocado a la liquidación después de que la Seguridad Social y Hacienda no acepten el convenio ofrecido por la empresa
ALFONSO VÁZQUEZ. MÁLAGA Junto con Antonio Martín, el restaurante Casa Pedro es un histórico superviviente de la hostelería malagueña. Sin embargo, con 80 años de vida a sus espaldas, no está muy claro su futuro a corto plazo.
El problema viene de un procedimiento concursal que dura ya dos años en el que dos de los principales acreedores, Hacienda y la Seguridad Social, "no han aceptado el convenio ofrecido por la empresa", algo que sí ha hecho el Ayuntamiento de Málaga que también está personado, según informa el secretario de Hostelería, Comercio y Turismo de CCOO de Andalucía, Gonzalo Fuentes, que ayer, aprovechando que el restaurante cierra los lunes, pudo reunirse con los trabajadores.
"Verdaderamente esto lleva a la liquidación pero ahora tenemos un periodo de consulta y no tiramos la toalla", resaltó. Fuentes ha expresado su deseo de que, en lugar de que los interventores concursales remitan el expediente de extinción de puestos de trabajo, "queremos que el expediente sea de suspensión, a ver si en tres meses hay algún tipo de alternativa, primero por los puestos de trabajo, ya que algunos entraron con pantalón corto, y luego por lo que representa Casa Pedro, un ´templo del pescaíto´ de Málaga".
"Es rentable". A juicio del secretario de Hostelería de CCOO, "Casa Pedro es rentable y lo que ha habido, desde nuestro punto de vista es una mala gestión".
Enrique Sánchez, uno de los 22 trabajadores de Casa Pedro, que entró en el famoso establecimiento en 1975, explica que la idea de los trabajadores "es seguir abriendo hasta que el juez dictamine el final de la empresa". Sin embargo, este veterano trabajador admite: "No sabemos cuánto tiempo vamos a aguantar porque en ocho semanas hemos cobrado 500 euros".
Los empleados de Casa Pedro han interpuesto una demanda de conflicto colectivo para poder cobrar los atrasos. El hecho es que, el pasado sábado, algunos de ellos se despedían de los clientes más fieles con lágrimas en los ojos, intuyendo un futuro más que tormentoso.
Santiago González, presidente de la asociación de vecinos de El Palo, ha lamentado la situación por la que pasa Casa Pedro, "un restaurante emblemático de Málaga", y ha abogado porque la situación se resuelva y en caso de que desaparezca, "que alguien lo retome, dado lo que representa en El Palo y en Málaga".
Historia. En 1925, Pedro Martínez abre una pequeña taberna en El Palo que se hace famosa por su caldito de almejas. Tres años más tarde, en 1928, decide ir a mayores y abrir la primera Casa Pedro, un edificio de planta baja con unas cinco mesas. En 1931 Casa Pedro crece con otra construcción adosada y dos comedores para 40 personas. Enfrente irá un chambao de caña.
En la posguerra se hace muy popular un casetín de madera del establecimiento con reservados. El restaurante sigue imparable su ascenso. En 1950 muere Pedro Martínez y la segunda generación, con Lorenzo Martínez al frente, levantará un restaurante de grandes proporciones. En 1963 el restaurante consigue una concesión administrativa indefinida de los 1.100 metros del negocio. La Ley de Costas obliga a derribar estas instalaciones en 1990 y a levantar las actuales.
Entre los incontables clientes de Casa Pedro destacan la cantante Concha Piquer, el cantaor Pepe Marchena o la saga taurina de los Bienvenida, además de numerosos ministros y artistas. Un trozo de la historia gastronómica de Málaga con platos clásicos como la sopa viña AB, la paella con mariscos pelados, el lomo de merluza con gambas y almejas, el rape a la serrana y el pescaíto frito en toda su variedad.
